Procesado el sombrío balance por la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), la situación de la Libertad de Expresión y el Derecho a la Información en México, es la siguiente:
Entre 2001 y 2005, se presentaron 208 quejas por actos de violencia contra medios de comunicación y periodistas. De 2006 a 2010, el número se elevó a 390.
Entre 2011 y 2015 la cifra ya alcanzó 439 casos. Total en los tres lustros: Mil 37 atentados.
Según la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), entre enero de 2010 y noviembre de 2015, fueron asesinados 150 periodistas en América. Uno de cada tres crímenes fue cometido en México.
Las dos fuentes fueron consultadas por una misión especial del capítulo para América Latina de Reporteros sin Fronteras, que hoy dio a conocer en el recinto del Club de Periodistas de México, un reporte de sus indagatorias.
Los datos fueron sustanciados por Reporteros sin Fronteras en un cuaderno bajo el rubro Veracruz: los periodistas frente al Estado de miedo.
El primer apartado del reporte tipifica a Veracruz como “el estado más violento de México, el país más mortífero de América Latina”. Con esto estaría dicho todo.
Veracruz, en efecto, es el referente de la investigación; “Veracruz es el lugar más peligroso del continente para los medios de comunicación, en un México que oficialmente no está en guerra, pero que padece desde hace décadas la violencia de los cárteles de la droga”, escribe en la presentación del cuaderno citado Emmanuel Colombié, director del Despacho América Latina de Reporteros sin Fronteras.
Las personas periodistas de Veracruz se encuentran entre la espada y la pared; por un lado enfrentan a los políticos corruptos y, por otro, a los cárteles ultraviolentos, añade Colombié.
En el espejo de Veracruz se refleja la monstruosa e impune amenaza que pesa sobre la comunidad mexicana toda que ejerce el oficio periodístico en medio de una siniestra espiral sin solución de continuidad.
La Constitución no funciona con rituales burocráticos
El Club de Periodistas de México, que en sus órganos de difusión ha venido dando puntual seguimiento a ese estado de opresión y represión, no puede menos que refrendar su compromiso de solidaridad gremial y la exigencia al Estado mexicano de que asuma su deber como garante de derechos y garantías consagrados por una Constitución, cuyo centenario será objeto de festejos por los tres Poderes de la Unión el próximo 5 de febrero.
Los mandatos de la Carta de cartas no funcionan con meros rituales burocráticos. Frente al luto de viudas y huérfanos, la sociedad demanda acciones concretas, tangibles, que demuestren que vivimos de veras en un Estado de Derecho. Otra cosa es pura demagogia, simulación e hipocresía.
Mouris Salloum George
Mouris Salloum George: Director del Club de Periodistas de México A.C.
